Una cámara instantánea es un tipo de cámara fotográfica que permite imprimir las fotos al instante, sin necesidad de revelarlas en un laboratorio. Este tipo de cámara se hizo popular en la década de 1970, gracias a la marca Polaroid, que fue la primera en comercializar este tipo de cámaras.
Una de las ventajas de las cámaras instantáneas es que permiten tener una copia física de la foto al instante, lo que las hace ideales para eventos sociales como bodas, fiestas de cumpleaños o reuniones familiares. Además, las cámaras instantáneas suelen ser muy fáciles de usar, lo que las convierte en una opción popular para los aficionados a la fotografía.
Sin embargo, también existen algunas desventajas en el uso de cámaras instantáneas. Por ejemplo, el papel especial que se utiliza para imprimir las fotos puede ser costoso y difícil de encontrar en algunos lugares. Además, la calidad de las fotos puede ser inferior a la de las fotos digitales, ya que las cámaras instantáneas no suelen tener la misma resolución que las cámaras digitales.
A pesar de estas limitaciones, las cámaras instantáneas siguen siendo populares entre los amantes de la fotografía y los nostálgicos que buscan revivir la experiencia de las cámaras Polaroid de antaño. Además, algunas marcas han lanzado nuevas versiones de cámaras instantáneas que combinan la tecnología analógica con la digital, lo que permite obtener fotos de alta calidad y compartirlas en redes sociales.